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lunes, 23 de abril de 2018

Más fotografías del acto con los Reservistas Voluntarios, enviadas por algunos de nuestros colaboradores

Introducción/presentación ANTONIO TROYANO


Excelentísimo señor Alcalde de Bailén, Excelentísimo Señor Subdelegado de Defensa, Ilustrísimo Maestre de la Orden de Caballeros Ballesteros de la Santa Veracruz del Rey Fernando III, Excelentísimos concejales de nuestro Consistorio, Excelentísimas autoridades civiles y militares, homenajeados, familiares, miembros de ambas asociaciones organizadoras y amigos:

   Es para mi, como presidente de la Asociación Histórico Cultural General Reding, un placer, presentar este acto y al mismo tiempo imponerle la Medalla de la Artillería, a las personas que hoy premiamos de las que conoceremos parte de su currículum en el transcurso del acto. Otro año más traemos a esta histórica ciudad de Bailén, a ilustres patriotas, hombres y mujeres con valores reconocidos. Son ya son cinco las ediciones, desde que comenzáramos en el año 2011, de forma bianual, aunque este año hemos roto la norma, debido al gran número de personalidades acreedoras a esta distinción. Decenas de anécdotas que se acumulan en nuestra retina, gestos de sorpresa cuando les comunicamos el fallo del jurado, nervios, sudores, nostalgias, recuerdos de otros que los recibieron en ediciones anteriores y que llevan sobre su pecho a gala el nombre de Bailén y de sus gentes.

Un pequeño grano de arena que aportamos desde nuestras asociaciones para el conocimiento de nuestra historia, de nuestra cultura, de nuestras raíces occidentales de libertad, de democracia y de respeto, sobre todo de respeto, algo que no debemos olvidar y que en estos momentos de convulsión sobre el significado de lo que es la Patria, se hace más necesario que nunca reivindicar. Y para eso estamos tanto la Asociación CAECILIA, portadora del germen cultural a través de sus poemas acrósticos, como la Asociación GENERAL REDING, que aporta el símbolo que nuestros premiados lucirán orgullosos sobre su pecho.

Es apenas un trozo de metal agarrado de una insignificante tela, apenas eso, pero en su interior alberga el rojo de la sangre derramada por nuestros antecesores, el verde de nuestros olivos, que se traduce en esperanza, y el rojo y gualda de nuestra bandera, sobre el que pende la corona real, cruzada con dos piezas de artillería y en el centro, presidiéndolo, observándolo, el busto del General Reding, el auténtico vencedor en nuestra gloriosa Batalla de Bailén, y que da nombre a nuestra asociación. Este insignificante trozo de metal y de tela encarna los valores de aquellas personas que hoy condecoramos, y que son y serán ejemplo para generaciones más cultas y a la vez más críticas, forjadoras de una España unida, sin fisuras. Muchas gracias.






































  Asociación H. C. General Reding

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