El grupo de lectura TINTA DE LIMÓN se reunió en Canena y Linares el domingo 5 de febrero

El grupo de lectura literaria TINTA DE LIMÓN,en este caso formado por un total de 32 personas, incluídos los más jóvenes, y bajo la magistral batuta de su coordinador, Antonio García de la Llave, el pasado domingo 5 de febrero, se desplazó a la villa jiennense de Canena, para celebrar su actividad trimestral, de carácter cultural, visitando el Castillo de Canena, de manos de su propio dueño, don Francisco Bañó, gracias a la inestimable mediación de Santiago Molina, concejal de la villa, colaborador y amigo de la Asociación Caecilia, de la Asociación General Reding y del grupo Tinta de Limón, que recientemente fue homenajeado con la imposición de la medalla conmemorativa del Bicentenario de la Batalla de Bailén, en esta localidad.

Tan cercano y a la vez tan lejos de nosotros, esta fortaleza-palacio, reformado por el genial arquitecto del renacimiento, Andrés de Vandelvira, que lo remodeló por encargo de la familia ubetense De Los Cobos, encierra entre sus centenarias piedras, hoy toda la magia y el misterio del paso del tiempo y de la historia. Amplias estancias, una torre del homenaje impresionante, no menos que su patio enmarcado entre columnas y balaustradas, nos abrió su arquitectura para mostrarnos una ciudad que, como el resto de la provincia, es cruce de caminos y de pueblos.

  Además, Francisco Bañó nos confirmó un dato que veníamos demandando hacía un tiempo, y es que las tropas napoleónicas, en la Guerra de la Independencia, tuvieron una guarnición de soldados imperiales alojada en dicha fortaleza, lo que nos da pie a la Asociación Histórico Cultural General Reding a organizar un acto en la ciudad de Canena, en colaboración con el Excmo. Ayuntamiento de la Villa, edificio que por cierto también visitamos, y que nos maravilló por sus extensos jardines que rodean a esta formidable edificación.

  Más tarde visitamos un curioso Museo, de las Telecomunicaciones, explicado por su propio director, don Pedro Vílchez, y por don Cristóbal Torres, ingeniero de Telefónica, que nos mostraron en vivo infinidad de equipos y aparatos de telefonía de todo el siglo XX y actuales, todos ellos en perfecto estado y lo mejor: funcionando, incluidas las mesas de las operadoras de los años 20 y 30, que se usaron hasta los primeros años 70.

   Tanto a don Francisco Bañó como a don Pedro Vílchez y a Cristóbal, ingeniero de Telefónica, se le entregaron libros escritos y editados por varios de los asistentes, como el caso de Miguel Ángel Perea y Manolo Ozáez, así como diversos ejemplares de BAILÉN INFORMATIVO y una serie de piezas de cerámica elaboradas por la Alfarería Las Cazuelas de Bailén, que sus propios dueños entregaron gentilmente.

   Posteriormente degustamos en un mesón de la localidad sus famosas tapas y, tras reponer fuerzas que nos permitieran combatir el frío de La Loma, nos trasladamos a la cercana Linares para continuar nuestra visita cultural y de ocio en el Mesón/Museo El Lagartijo, donde volvimos a compartir mesa y mantel. Por último nos dirigimos al Museo de Los Marqueses, dando por concluída la visita hasta el próximo contacto.

    B.I.