AFRAMA BAILÉN SE ACABÓ
Llevo mucho tiempo dándole
vueltas a hacer este escrito, sobre todo por las consecuencias que me pueda
acarrear; pero ha llegado el momento de hacerlo, y será la última vez que hable
sobre este tema.
En primer lugar, quiero contar una de tantas historias que han sucedido a lo largo de diez años en los que he tratado de ayudar a los perros y gatos de nuestra ciudad, desde el día en que se me ocurrió poner en marcha, una Asociación protectora de animales en Bailén, AFRAMA. El último episodio ocurrió el día 21 de diciembre pasado, alguien llegó a la puerta de mi casa, aparcó su coche, tocó al timbre y dejó en una caja tres cachorros de perro, cuando abrí, vi el coche salir calle arriba disparado, eran las 9 de la noche. En ese momento me disponía a arreglarme para ir a una reunión, los dejé en mi casa, cuando volví, les di de comer, los atendí, y tuve que estar toda la noche despierta, cuidándolos, pues lloraban, chillaban…, pegada a ellos hasta las 8 de la mañana que fue cuando se tranquilizaron.
Después han estado en mi casa
hasta el día 2 de enero; durante estos días, han comido más de medio kilo de
pienso diario, he limpiado su habitáculo dos veces al día, he viajado y he
tenido que pedir el favor a una amiga para que venga a cuidarlos, les he
pagado sus costes de desparasitación, vacunas y viaje a una protectora
catalana, y todo esto a cuenta de mi bolsillo, y sin necesidad de ello. Ya no
lo hago porque quiero, sino porque me obligan, porque juegan con nuestros
sentimientos, porque los que realmente amamos los animales no somos capaces de
dejarlos abandonados de noche con hambre y frío, y de causarles sufrimiento. Sí
me complico la vida, pero ellos no tienen la culpa de la irresponsabilidad
humana, yo tampoco, y aunque suene mal el que yo lo diga, la próxima vez que
suceda, pondré la correspondiente denuncia por abandono y maltrato que es como
se considera este tipo de actuación tan aberrante. Y aunque me duela y sé que
por esto hay quien va a poner el grito en el cielo, los llevaré a manos de
quien les corresponda hacerse cargo legalmente de ellos, yo ya no recojo
animales.
Cualquier persona es libre de trabajar en una asociación y de dejar de hacerlo, por el motivo que sea; claro, cualquiera menos LAS DE
tengo derecho a dormir una siesta si me apetece, sin que me molesten al teléfono o a mi timbre, para decir que tienen perros para dar que ya no quieren, y a comer tranquilamente, y a cenar; tengo derecho a acostarme a la hora que yo quiera sin que me molesten a las 12 de la noche, a la 1 de la madrugada o a las 7 de la mañana para lo mismo, no soy un servicio 24 horas; tengo derecho a hacer con mi vida lo que me dé la gana, y si en este momento y para siempre, no quiero seguir trabajando con animales, tengo derecho A QUE ME DEJEN EN PAZ; tengo derecho a poder elegir lo que quiero hacer con mi vida. ¡¡¡BASTA!!!
A nadie tengo por qué dar explicaciones cuando me molestan en mi casa, y digo que ya no hay protectora, y me siguen insistiendo, y dándome mil razones, poniéndome en un brete, encima se me enfadan porque no los coges, cuando no me han insultado en la misma puerta de mi casa. Nadie de todos/as los/as que vienen a mi casa que tanto creen querer a los perros, serían capaces de soportar lo que muchas veces soportamos las de la “Protectora que ya no existe”.
¿Cuántos de ustedes serian capaces de tener diez animales en sus casas? Tenemos el derecho de decidir cuantas mascotas queremos tener, y no me digan, “no haberte metido en esto”.
Aparte hay motivos muy
personales, que me han hecho tomar la decisión de dejar este proyecto, y vuelvo
a repetir merezco tener la libertad de elegir si quiero o no dedicar mi tiempo
libre a los animales, y hablo de tiempo libre, porque esto nunca ha sido un
trabajo, y remunerado menos (que esa es otra la gente me ha dejado muchísimos
“muertos” a lo largo de los años pero poquísimas personas han ayudado
económicamente a la causa, por eso digo que esto es una falsa obra de caridad),
aunque haya gente que así lo crea.
Como ven estoy muy cansada con este tema, espero que lo entiendan y se lo cuenten a sus vecinos, ya no hay Protectora en Bailén, ni se recogen animales en nuestras casas, dejen de molestar, por favor.
AFRAMA Bailén murió y se la
cargaron muchos vecinos de Bailén.
Perdonen si he sido un poco dura, pero ya no sé cómo acabar con esto, espero que al menos intenten entenderme.
JUANI MUÑOZ GARRIDO
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