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martes, 26 de octubre de 2010

Nacido el 4 de Julio

El pasado 13 de agosto, aprovechando mi cambio de residencia temporal en la ciudad de Hermosillo (México), y la cercanía de esta ciudad norteña del país azteca con Estados Unidos, decidí visitar varias ciudades y pueblos del Estado de Arizona (EEUU).
Voy a contarles una experiencia personal en la odisea de cruzar la frontera entre México y Estados Unidos de forma legal en uno de los lugares sino más peligrosos sí difíciles debido a la Ley SB 1070 (más conocida como Ley de Arizona) que desde Arizona su gobernadora ha dictaminado.


He dicho en muchas ocasiones que desde un avión no se ven las fronteras pero desde la carretera, ¡vaya que sí se ven!, he llegado a la conclusión de que las fronteras desde el suelo son cicatrices en la tierra.
Nos desplazábamos dos compañeros mexicanos y yo en un todoterreno cedido por la Universidad de Sonora (México) donde he estado realizando una estancia de investigación durante los meses estivales. Llegamos a la ciudad fronteriza de Nogales (México) sobre las 9 de la mañana después de casi otras tres de viaje. Los colegas mexicanos me dicen que me baje del coche y me dirija a la frontera porque no tenía permiso para entrar en Estados Unidos y nos íbamos a demorar bastante tiempo, pasaban con el coche y al tener el permiso su paso es puro trámite de deslizar sus visas por una banda magnética y registrar el coche.
Me bajé del coche en una cola kilométrica y me dirigí a la frontera de México con EE.UU en Nogales. Tardé como casi 3 horas en entrar en la frontera, allí un policía americano me preguntó en inglés que le entregara el permiso, le contesté en español diciéndole que no tenía y entonces me pidió mi teléfono móvil y mi pasaporte. Acto seguido me pasó a una sala de espera de la que salían como pequeñas celdas, allí había dos jóvenes que por su apariencia eran mexicanos en espera del mismo trámite que tenía hacer.
Mientras esperaba a una de las personas que estaba a la espera, al igual que yo, le dijeron que no podía entrar en Estados Unidos y que se tenía que volver a México. A la otra persona le devolvieron su documentación y le dijeron que tenía que esperar todavía más tiempo. A casi la media hora vinieron en mi busca para devolverme el teléfono móvil y decirme que un policía americano me iba a acompañar a las oficinas de la parte arriba del edificio para rellenar el permiso, pagar los 6 dólares y poder entrar así en el país sin ningún problema. Así fue, el policía (bastante serio) ya me estaba esperando, subimos arriba y me dijo que me colocase en otra fila de personas, mientras él pasó por detrás de un mostrador para entregarle a otro policía fronterizo mi pasaporte.
En esta fila había delante de mí como unas cuarenta personas y eran ya casi las 12 del mediodía. Los dos colegas mexicanos ya habían entrado en Estados Unidos y fueron a decirme que mientras esperaba se iban a Nogales (Arizona) a cambiar pesos mexicanos a dólares. A los 5 minutos de estar en esta última fila el policía que tenía mi pasaporte dijo en voz alta mi nombre, a lo que respondí. Entonces el policía me invitó a abandonar la fila y me preguntó si había nacido el 4 de julio o el 7 de abril (los americanos dan la vuelta a esta fecha), inmediatamente respondí: “señor nací el 4 de julio, día de la independencia de los Estados Unidos de América”, esa fue la primera vez que vi un policía sonreír, me dijo que le acompañase por el mostrador, me llevó a su mesa y me rellenó el permiso, pagué los 6 dólares, me selló el pasaporte y me dejó entrar en el país, pero antes me hizo 3 preguntas: ¿Dónde vivía?, ¿De dónde venía? y ¿A qué iba a Estados Unidos?, seguidamente respondí: “vivo en Bailén (España), vengo de Hermosillo y voy a Tucson a gastar dólares”.

Si alguna persona está leyendo este artículo, nació un 4 de julio y va a visitar USA debe tenerlo en cuenta aunque es obvio que también dependerá del policía o policías que le toquen en ese momento en la frontera, aunque tengo comprobado que es más fácil entrar en Estados Unidos por avión que por carretera.


Eufrasio Pérez Navío

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