El cementerio sin cipreses

¿Es cementerio el camposanto que no tiene cipreses? Sí. ¿Es cementerio el que no tiene cruces? Sí. ¿Pero un cementerio sin cipreses, sin cruces y sin entierros? Ese es otra cuestión más filosófica. Podría ser que este recinto desea ser cementerio, como una piedra de mármol que sueña ser escultura. Para ello se necesita no sólo el cincel y el martillo sino al escultor valiente. Un artista que mirando la piedra, percibe que en su interior oculta un caballo y armado con su buril, desbasta una a una las esquirlas que le sobran a la piedra hasta convertirlo en caballo de mármol.
Tanta poesía para decir que esta obra sigue sin concluirse y que produce pena, lástima y sentimiento.