
Me han enviado por correo esta anécdota, espero que la disfrutéis:
Ahora un chiste verídico sobre la Semana Santa bailenense: procesión de la madrugá por la calle de La Amargura. Entre el gentío se ve un penitente nazareno con el rostro descubierto, con chaleco reflectante y la vela al hombro. En esto que lo ve el jefe de filas y le dice: niño, ¿no ves que vas haciendo el tonto?. Le contesta el penitente: No, si el tonto lo ha hecho mi madre, que le ha dao el bocadillo a otro.
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